Lo blanco y lo negro

La relación entre México y Estados Unidos en cuanto a la política exterior, se ha visto desquebrajada a partir de la llegada del Presidente DONALD TRUMP. Es sabido que desde su campaña amenazaba con la construcción del muro fronterizo en el Sur de su país, lo cual significaba que sería con el nuestro.


TRUMP, argumentaba que México contaba con recursos suficientes para la construcción del muro, a través de los recursos contemplados en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte TLCAN; y en caso de que México no aceptase, entonces terminaría con el TLCAN.
Ante esta situación, el Presidente de México, ENRIQUE PEÑA NIETO, aseguró que la renegociación del TLCAN sería fundamental en política exterior durante los meses que aún tenía de gestión y que México se mantendría en una posición seria, firme, constructiva y con base en principios objetivos.
La situación se fue haciendo cada vez más álgida entre las tres naciones, porque tanto México como Canadá estaban a favor de la continuidad del Tratado, mientras TRUMP declaraba que su intención era liquidarlo, lo cual ocasionó que el peso mexicano se tambaleara en diversas ocasiones.
TRUMP fue cediendo a los argumentos de la importancia del Tratado, sin embargo señaló que si las condiciones no eran justas, entonces saldría definitivamente.
El Primer Ministro de Canadá JUSTIN TRUDEAU, mostró firmeza desde un principio en cuanto a su postura para continuar con el TLCAN derivado del nivel comercial fundamental entre las naciones argumentando el nuevo proteccionismo de TRUMP afectaría a las familias trabajadoras de las 3 naciones.
Las pláticas de negociaciones siguieron su cauce durante meses representando al Gobierno mexicano el Secretario de Economía ILDEFONSO GUAJARDO y de Relaciones Exteriores LUIS VIDEGARAY, quienes no bajaron la guardia en busca del objetivo.
Después de altas y bajas tanto del peso como de las propias negociaciones, México y Estados Unidos logran por fin un acuerdo comercial, mismo que darán a conocer a Canadá para invitarle se sume. El mandatario norteamericano calificó el acuerdo como fantástico y fundamental sobre todo para el sector automotriz, y que dicho acuerdo será satisfactorio para los dos países.
El resultado final, se dará a conocer en los próximos días y deberá ser firmado por el actual Presidente de México ENRIQUE PEÑA NIETO.