A la mañana siguiente de las elecciones, cuando el triunfo de las oposiciones es ya un hecho, el ciudadano presidente,

lleno de ira, de coraje, reacciona mal. Coge el mítico teléfono rojo, la orden es tajante, General Secretario, saque a sus tropas a la calle de inmediato, y que ocupen la plancha del Zócalo.

El General Secretario, sin titubeo alguno da la orden directamente, salir a las calles de todo el país y controlar los desordenes, y las marchas de las oposiciones,

No queda espacio para la duda, el ciudadano presidente planea algo y ese algo es desconocer el resultado de las elecciones, porque ha perdido su candidata.

A pesar del INE controlado al través de la Consejera Presidenta, y con todo y el TEPJF, también controlado por la Magistrada Presidenta, y con todo lo vulnerable de la SCJN.

Los veinte puntos de diferencia tan contundentes, inobjetables, la presencia de observadores electorales de otras nacionalidades, daban fe del triunfo opositor.

El ciudadano habitante de palacio, no quiere aceptar ni aceptará la derrota.

La candidata oficial derrotada, llama a sus seguidores a desconocer el triunfo de su adversaria, pide a sus huestes a iniciar revueltas y mítines violentos.

Alega un fraude que no puede probar, acusa a las autoridades electorales de vendidas, y al Tribunal Electoral, de negarle el triunfo, por acciones leguleyas.

El presidente sale a las doce del día en punto a dar un discurso para desconocer el resultado de las elecciones y para anunciar que desconoce a las autoridades electorales y al Poder Judicial, no se conforma con el Tribunal Electoral.

Anuncia que el Ejercito deshará cualquier manifestación en favor de la usurpadora, acusa que la candidata de las oposiciones hizo trampa y que tiene pruebas.

Insiste en qué, él y su gobierno no son iguales, y que no va a permitir el regreso de los “conservas” ni reconocerá a ninguna autoridad, porque son corruptas.

Anuncia el cierre inmediato de todas las oficinas del INE en todo el territorio nacional y el cese de todos los funcionarios electorales.

Informa que tanto los consejeros electorales, así como los magistrados del Tribunal Electoral, han sido encarcelados acusados de “traición a la patria”.

Confisca todas las concesiones de radio y televisión por haber traicionado a la democracia y contribuir al supuesto triunfo de la candidata opositora.

Para evitar la fuga de capitales señala se ha tomado la medida de solo retirar en pesos mexicanos hasta cincuenta mil por cada dos semanas, para evitar la fuga de capitales.

Aunado a lo anterior, se cierran las fronteras, se impide el paso de migrantes, y serán expulsados los que estén dentro del territorio nacional.

Se confiscan las empresas extranjeras, el TEC-MEC lo anula de facto el gobierno mexicano.

Los líderes de las oposiciones ganadoras, así como su candidata son encarcelados acusados de sedición, los líderes de los partidos paleros de su partido, también son arrestados.

EEUU y Canadá protestan y amenazan con llevar hasta sus últimas consecuencias en lo legal a México, y anuncian la toma de medidas más radicales, sin decir cuales.

Gobiernos de países integrantes de la Unión Europea, retiran a sus embajadores y llaman a consultas a los representantes mexicanos.

Cuba, Nicaragua y Venezuela, lanzan consignas de apoyo a las decisiones del gobierno de México, reconocen la valentía del presidente hermano.

Colombia y Chile, envueltos en sus propias luchas internas, no dan señales ni de apoyo ni de no apoyo.

Argentina llama a la colonia argentina, a salir de inmediato del país. El rechazo internacional es grande y contundente, conforme pasan los días, la tensión se vuelve insoportable, es anunciada una prórroga del mandato del presidente, mientras es posible reestablecer el orden constitucional y se convoque a nuevas elecciones.

Ojalá todo quede en pura ficción, sin embargo, todo es posible.

Feliz 2024 estimados lectores. Hasta la próxima.

Hasta la próxima.

Jesús Corona Osornio

@coronaoso  This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.

Periodista, Psicoanalista, Director de Analítica Lacaniana, autor de El Acento Periodismo. Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión. con más de 37 años ejerciendo el periodismo en México.