Esta vida llena de tecnología, permite a gran parte de la sociedad, pues no todos tienen los recursos para ello, ser espectadores de espectáculos  virtuales, muchos de ellos transmitidos por las redes sociales y en los medios de televisión.

 Los niños, adolescentes y adultos se han convertido en amantes de la tecnología, eso provoca que dependan y crean ciegamente en lo que ven principalmente en las redes sociales.

Ahora, el circo y la magia sucede en las redes sociales, para aquellos que no han visto un circo en la realidad, es un espectáculo artístico, normalmente itinerante, que puede incluir a acróbatas, contorsionistas, equilibristas, escapistas, forzudos, hombres bala, magos, malabaristas, mimos, monociclistas, payasos, titiriteros, tragafuegos, tragasables, trapecistas, ventrílocuos y zanqueros. Es presentado en el interior de una gran carpa que cuenta con pistas y galerías de asientos para el público.

Pues tal como en un espectáculo circense se caracteriza en tener diferentes distractores en todo el escenario para evitar que el público espectador se dé cuenta como se originó el espectáculo principal para no descubrir la magia del espectáculo principal, así el gobierno federal se ha convertido en el artista circense que tiene el espectáculo principal, todos los demás poderes y autoridades realizan su función para cubrir la magia principal, o tal vez serán marionetas en lugar de acróbatas.

Los espectáculos como la venta del avión presidencia, la rifa utilizando a la lotería como parte del acto principal, el asunto de Lozoya que ahora ya no sabemos que pasó, el saludo de manos de la mamá de Joaquín Loera, solo son aquellos actos circenses para cubrir la magia del acto principal.

Desafortunadamente, la realidad no es como el espectáculo del circo, en este el público se divierte y alcanza a ser feliz al finalizar el show, así el espectador sale satisfecho y convencido de que valió cada centavo que pagó por el evento; claro, siempre y cuando sea de alta calidad.

Al contrario de la realidad, los actores del circo son los únicos beneficiados, los únicos que se divierten en como el público se mueve a su ritmo y como no se dan cuenta que atrás del escenario suceden los mejores espectáculos diseñados para los familiares y amigos del director del circo y dueño ambulante por seis años, y si no nos ponemos abusados será dueño durante 12 años.

En alguno momento del espectáculo el público ahora llamado pueblo, se dará cuenta que por lo que pago, no en dinero si no en voto, valorará si eso valió la pena por el show dado, y veremos si al final del espectáculo el publicó se encuentra feliz.

Destaca, una pequeña escena de la atracción principal llamada avión presidencial, tal como lo hiciera David Copperfield aparece y desaparece objetos de gran envergadura a los ojos de los espectadores. También tiene esa magia, aparece y desaparece cuando el mago quiere distraer la atención de la realidad, solo que una parte de la realidad ha provocado que muchos mexicanos pobres y ricos estén muriendo por el virus del Covid que se ha dispersado en todo el circo, pero el show debe continuar o ¿no?

Pero la gente que no ha corrido la suerte de morir o enfermarse sigue embelesada con el espectáculo mágico musical; eso sí, hacen olvidar la tragedia que se vive dentro y fuera del circo. Lo que hace preguntarnos si valió la pena pagar el costo del boleto comprado, pues hasta los actores del mundo del espectáculo que convencidos compraron boletos para el circo, se han salido quejándose amargamente de los actos circenses, pues les está por pegar en los bolsillos.

También se presenta un gran espectáculo, en donde parece un Truman show, mejor que el mismo Jim Carrey, pues en ese show salían a escena y eran importantes otros actores pero en este show que se presenta todas las mañanas y todo los días por televisión, radio y redes sociales solo aparece un solo actor, en donde presenta todos sus actos a los espectadores manipulando la voluntad de los demás, tratando de demostrar a los espectadores su realidad y que todos hablen de su realidad, hipnotizando a estos para que no se den cuenta de su realidad, a pesar que todo su entorno está completamente anverso del espectáculo presentado por las mañanas.

Pero más que espectáculo circense tal pareciera un adoctrinamiento, que aquel que no quiera formar parte de la legión llamada transformación, deberá ser sacrificado o echado a los leones, como si se tratara del circo más antiguo de la historia, el coliseo, que echaban a los leones a los enemigos del emperador llamados gladiadores.

Pero para que todo espectáculo y la estrella principal salgan y se vean bien, el circo deberá contar con payasos, animales incluso marionetas, hasta objetos inamovibles que forman parte del espectáculo.

Pero este circo está mal instalado y los actores ya deben jubilarse, las acrobacias ya son de espectáculos del pasado, se deben contratar nuevos actores circenses, pero a pesar de ello, los actuales actores del circo se quejan de los dueños anteriores; cuando la responsabilidad de mejorar y de que el circo funcione o no se vaya a la quiebra depende de los dueños actuales, deben invertir en mejorar el circo para darle al espectador el mejor show, pues para eso pagaron los espectadores, pero parece que el circo se derrumbara y apuesto a que los dueños actuales le echaran la culpa a los anteriores.

Pero los payasos, la barra inerte, los títeres, los actores y animales que forman parte del circo solo salen cuando el dueño del circo se los autoriza, y todos están a sus órdenes, todo para ayudar al espectáculo del primer actor, el circo no es de los mejores ni si quiera de los medianos, pero sus trabajadores como en la ley de la oferta y la demanda pretenden que el público siga comprando entradas para ver el show.

Creo que el circo debe renovarse o morir, pero eso solo lo decide el público, lamentablemente ya no se permite que el público arroje verduras cuando el show es malo, pero comencemos por tomar una decisión distinta de que otro circo podemos pagar, la lista de circos la podrán ver la próxima jornada electoral, pero hay que informarse qué actores, animales y payasos tienen los otros circos y quien ofrece mejor espectáculo, porque los circos se sostienen gracias a nosotros que compramos las entradas.