El tiempo cura las heridas y hoy retomo nuevamente mi columna “Estado Capital”,
un espacio donde analizaremos lo que vivimos día a día en la política nacional y local. Y empezamos en estos días donde ejercer el periodismo se ha convertido en uno de los oficios más peligrosos del mundo sobre todo en México pero no por ello dejaré de ejercer la carrera más hermosa del mundo. Gracias a El Punto Crítico por abrirme las puertas de esta casa editorial.
La grilla en San Lázaro y en el Senado de la República ha subido de tono conforme avanza las negociaciones entre los grupos parlamentarios asentados en el Congreso de la Unión donde de acuerdo a la Ley Orgánica del Congreso de la Unión se cambiará a los presidentes de las Mesas Directivas.
Por un lado está el partido en el Poder, Morena quien podría mostrarse como una fuerza toda poderosa y no cumplir el cambio de la Mesa Directiva en la Cámara Baja que de acuerdo a la ley este segundo año de sesiones le correspondería por números de diputados federales integrantes al PAN, y en el Senado también quedarse con esa misma posición pero rolando el espacio a un nuevo senador y no permitiendo que el morenista Martí Batres Guadarrama continúe ocupando esa posición en el coloso de Reforma.
Como vayan avanzando los días Morena deberá demostrar si puede ser esa fuerza política democrática, incluyente y que sabe trabajar muy diferente a los demás grupos políticos que lo han antecedido en el control de las Cámaras Legislativas o es un partido autoritario como hoy dio a conocer la diputada Dolores Padierna presentando una iniciativa “a modo” de reformas a la Ley Orgánica del Congreso de la Unión para que Morena presida la Mesa Directiva los tres años de la actual Legislatura, donde la principal jugadora a quererse quedar con esa posición es ella, ya que el experimentado Porfirio Muñoz Ledo deja de dirigir la Mesa, y ella como vicepresidenta quiere ocupar ese puesto.
Sin embargo, quien la ha visto suplir a Muñoz Ledo saben que le quedaría muy grande esa silla porque a la pobre mujer le gana su temperamento y ha mostrado autoritarismo en varias sesiones de la Cámara Baja cuando los trabajos del Pleno se han quedado bajo su tutela.
En la mañanera…
En el evento organizado por la Presidencia de la República y el Gobierno del Estado de México que se llevó a cabo en el municipio del Valle de Bravo, sorprendió el facto de tacto para los reporteros que llegaron a cubrir la famosa conferencia de prensa “mañanera” toda vez que bajo el argumento de protección AMLO dejaron afuera a varios reporteros de medios locales y nacionales.
Afortunadamente eso no opaco la información relevante que dieron a conocer el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, y el mismo Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, sobre las políticas implementadas en materia de seguridad pública para combatir el delito.
Del Mazo señaló que en lo que va del año, de enero a julio, se logró una importante reducción de los delitos de alto impacto que se registran en el estado de México, al pasar del 36 al 31 por ciento en los primeros siete meses del 2019.
El titular del Ejecutivo local precisó que se logró rebajar el delito de robo de vehículo con violencia y sin violencia, así como el robo en el transporte público de pasajeros, que es una de las quejas más sentidas de los mexiquenses y que se concentra principalmente en 18 municipios donde las autoridades ya pusieron en marcha diversas medidas de contención y apoyo a la población.
Del Mazo agradeció el trabajo conjunto con la Federación y los recursos otorgados para la construcción de 2 penales en la entidad y la llegada de 3 mil 500 elementos de la Guardia Nacional al Estado de México para disminuir el delito.