Benjamin Netanyahu y su proyecto de reforma judicial que a sus ojos amenaza la democracia.

Se trata de la mayor manifestación desde que Netanyahu volvió a ocupar la jefatura del gobierno el 29 de diciembre, tras haber sido desalojado del poder en 2021.

El nuevo gobierno, considerado como el más derechista de la historia del Estado hebreo, está formado por partidos de derecha, ultraderecha y ultraortodoxos judíos.

Según la policía, citada por la radio pública, hacia las 21:00 horas locales unos 20 mil manifestantes estaban reunidos en una plaza en el centro de la ciudad, situada en la costa del Mediterráneo.

También hubo protestas en Jerusalén, donde unas mil personas se congregaron frente a la residencia del primer ministro; y en Haifa, en el norte.

Las manifestaciones fueron convocadas por una organización anticorrupción, Banderas Negras, que pidió "salvar la democracia" en vigor en Israel desde su creación en 1948.

Los partidos de centro, de izquierda y la alianza de partidos árabes Hadash Taal se sumaron a los llamamientos a manifestarse, en particular contra la reforma de la justicia presentada el 4 de enero por el gobierno de Netanyahu, quien está procesado en varios casos por presunta corrupción.