Ciudad de México, 28 de julio 2020, - El catedrático Mario Rosales señaló que el proceso judicial en contra de Lozoya cuenta con una cantidad importante de errores y lo más probable es que ninguna figura de la política mexicana llegue a prisión.

 En entrevista para Urbe de hierro con Miguel Ángel López Farías, el catedrático en derecho Mario Rosales, analizando el proceso judicial de Emilio Lozoya. Durante la emisión del programa transmitido por ABC radio, el especialista comentó que la ley no ha evolucionado para estar por encima de la política; especificó que en la legislación mexicana no existe la figura de testigo protegido, señalo que se considera que se empleara el artículo 256 del código penal, el cual estipula el criterio de oportunidad en el cual posibilita todas las procuradurías del país decidir si se ejerce la acción penal.

Añadió que la fracción quinta del articulo 256 menciona que tendrá ciertos beneficios en cuanto el imputado aporte información esencial y eficaz para la apertura de un delito más grave del que se le acusa y se comprometa a compadecer en juicio, sin embargo, señalo que han existido diversas incongruencias en su caso, ya que debería de ser un delito más grave del que se le condena, además de que las evidencias deben ser sustanciales y Lozoya tendría que hacer la reparación del daño; al ser una cantidad tan alta es poco factible que lo haga.

El catedrático comentó que hasta este momento no se le ha inculpado de ningún cargo, por lo que lo más probable es que se le impute por esta figura y por lo tanto no se le pueda adjudicar algún cargo hasta el momento. En su punto de vista considera que su aprensión conlleva un pacto que no tiene énfasis jurídico, sino que involucra términos políticos, pues es considerada una buena estrategia ya que el próximo año, al ser electoral, se desea que los partidos revolucionario institucional y acción nacional no logren gran cantidad de votos.

Señalo que las filtraciones recientes solamente han atacado a intrigantes de los partidos antes mencionados, además de que las acusaciones dadas no tienen congruencia. Finalizó que los procesos judiciales están siendo llevados a cabo de manera errónea por lo que es poco probable que alguna de las grandes figuras de la política mexicana caiga en prisión y considera que es “Una estrategia para desprestigiar de los gobierno anteriores para afianzar los triunfos posteriores de MORENA” por lo que esta acción solo quedara en lo político recordó el caso de Elba Esther Gordillo ya que tiene similitudes.

“Urbe de hierro”