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La violencia desatada en el estado de Michoacán durante los últimos días ha originado 29  muertos entre policías y ladrones, sin embargo la tarde de ayer cayó la primera víctima "de alto mando",el vicealmirante Carlos Miguel Salazar Ramonet y su escolta quien fueron brutalmente asesinados por miembros de los Caballeros Templarios.

Los primeros reportes de la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR), indicaron que los hechos ocurrieron alrededor de las 13:00 horas en la ranchería La Noria, municipio de Churintzio, donde elementos de la Policía Federal, Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y Marinas de encuentran realizando operativos contra el crimen organizado.

En un comunicado, la dependencia federal dio a conocer que Miguel Salazar Ramonet era comandante destacamentado de la Octava Zona Naval ubicada en Puerto Vallarta, Jalisco, aseverando que al momento del ataque viajaba con su esposa, Rosa María Aguirre y su escolta, Ricardo Fernando Hernández, la primera lesionada y el segundo fallecido.

Las primeras investigaciones indican que el vicealmirante se desplazaba a bordo de una camioneta tipo Suburban sobre la autopista México-Guadalajara, donde se efectuaba una protesta en la caseta de Ecuandureo.

La protesta social los obligó a desviarse hacia un camino rural que conduce a la comunidad de Las Cruces, donde fueron emboscados por sujetos armados, quienes momentos después escaparon en tres camionetas de lujo.

Por los hechos,  militares y elementos policiacos de los tres niveles de gobierno se movilizaron para resguardar el área donde ocurrió la emboscada y emprendieron la búsqueda de los atacantes, para lo cual peinaron la zona por aire y tierra.

Sin embargo, testigos indicaron que hay un número indeterminado de detenidos que fueron trasladados a la delegación de la PGR en Morelia para deslindar responsabilidades y descubrir a los agresores.

Fuerzas de seguridad tomaron zonas rurales michoacanas

Miles de efectivos policiales patrullan las zonas rurales del estado de Michoacán en búsqueda de los líderes de los grupos criminales Los Caballeros Templarios y Jalisco Nueva Generación,  por lo que al menos seis helicópteros Black Hawk de la Policía Federal, la Fuerza Aérea y la Marina vigilan por aire las zonas rurales de Michoacán, apoyados en tierra por casi un centenar de vehículos tácticos, blindados y de transporte de tropas.

Unidades de Fusileros Paracaidistas, Fuerzas Especiales y Grupos de Operaciones Especiales son parte del patrullaje aéreo en el estado, principalmente en la zona serrana, que posee caminos de difícil acceso.

Fusileros como las Fuerzas Especiales militares son equipos de reacción expertos, entre otras cosas, en emboscadas y contraemboscadas; combates en montañas y zonas urbanas, además de  intervenciones por aire.

En tanto, los grupos especiales de la Policía Federal cuentan con adiestramiento en rescate de rehenes, aprehensión de criminales de alta peligrosidad, acciones antidrogas y contraterrorismo.