Y pues ni para quejarse, muchas especulaciones sobre  el campadrote Andy, pues cómo no se enloquecería si en los seis

 meses que estuvo en la pachanga, en la peda, en la parranda, festejando su triunfo con un gran apapacho de gorrones que siempre se pegan a los boxeadores, y les dicen que ellos son como “Tayson”, y que no hay buey que les aguante dos trancazos, que se recuerde cómo trajo por el ring de la amargura al campeón al que arrebatara los cinturones, en el buen sentido de la palabra, no vayan a pensar cosas malas, no le bajó los chones, solamente le arrebató, por un ratito, los cinturones, pero que chingados, pues en seis meses, el compadre Andy, ganó, nada más que 18 millones de dólares, de verdes, de aguacates para el taco, pues es lógico que, con esas cantidades, y el número de gorrones y entrevistas y de gandayas que le quieren bajar la lana, pues perdía el piso, y ni siquiera escuchó a su madrecita que le ha de estar recordando toda su parentela, pero en fin, sigue, cuando menos, siendo un hombre rico, y solamente falta que, con esa riqueza ganada a sudor y chingadazos, pues no le dé por entrarle a la política, pues al fin y al cabo pues hay muchos que han sido diputados, muchos de la farándula y del teatro y del desnudismo, bueno, hasta, se dice que muchos que no salieron del closet, pero se mantuvieron machines en las sillas, llegaron a ser buenos políticos y, hasta, con todo respeto, pues la “corcholata” llegó, y si el compadre Andy tiene el VoBo del ya saben quién, pues a lo mejor lo convence para que done su lana y deje de tener visiones y amarguras del dinero, para ser político, y no estaría nada mal que diera el ejemplo a los muchos ricachones que andan al lado del, ya saben quién, de donar su riqueza para no andar más que en la pobreza y en la austeridad, que es el camino para el país, bueno, así lo dice el que manda y manda…honestidad y austeridad, sin vicios, sin ambiciones, pero con estrecheces suficientes para entender que la vida, no solamente son cosas materiales, sino bondades y esperanzas… toda una nueva filosofía de la vida que, cuando menos, le llega cerca al otro, ya sabes quién, que dejaba a su paso cualquier cosa que tuviera riqueza para no ser tentado, esto es lo que deberían de aprender los ricachones que solamente se quejan pero no se ocupan…bueno, la verdad es que ellos se quejan y se ocupan para continuar mamando de los dineros populares y de los recursos de todos, pero es para conservar la confianza en el gobierno, de otro modo pues no. No andan experimentando de que sea más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja que un ricachón al reino del palacio, y a ver si ya ponen una oficina alterna para recibir a los famosos y ricachones, no se les vaya a atravesar un borrachito armado o los termine meando o balaceando, ya saben cómo andan las cosas por el centro histérico…
Y qué emoción, ya estamos a un día del festival “Guadalupe-reyes” y de aquí para adelante andaremos incróspidos como Andy, en pleno festejo, pero eso sí, ya nos fuimos a sacar los diablos y los malos pensamientos que nos corroen a diario, primeramente, el día ocho, llegamos a Juquila, donde está la virgencita, allá, por la costa de Oaxaca y que es tan milagrosa, tanto que en un punto, que siempre está en balazos y atropellos, pues se llegan a juntar hasta más de doscientos millones de pesos y, pues, los curitas, dicen que es por las marchas, perdón, por las peregrinaciones, y por tanto, les pertenecen, porque es dinerito de la fe, y los gandayas, pues ya le vieron el valor al cobre y dicen que son sus lares y que les corresponde, porque la virgencita les hizo el milagrito de que ahí lleguen los manifestantes, perdón los peticionarios, perdón, los peregrinos, para darles una ayudadita a los jodidos que ,de pronto, pues son ricos, y eso nos demuestra que el dinero solamente genera problemas y conflictos, y a lo mejor, por ello, la nueva filosofía es la austeridad, para que nadie ande de gandaya ni de aprontòn, con ambiciones, al grado de matar para quedarse con el dinero…
Lo curioso es que uno es lo que se piensa y otra cosa lo que sucede, porque yo recuerdo que de niño, pues hace muchos años, me llevaba mi padre a la Villa, y ahí, además de los miles y miles de peregrinos que llegaban con la fe bien puesta, con los pies cansados y dolidos, con pencas de nopal en las espaldas, de rodillas recorriendo los duros caminos y sangrando, llevando velas y veladoras, flores y limosnas, muchas limosnas, las llevaban con fe y a penas las prendían pasaban, otros monaguillos, recogiendo las ceras y rogando que avanzaran porque otros querían ver y recibir las bendiciones de la Virgen de Guadalupe, y pues lo que yo escuchaba eran peticiones no de fe ni de fuerza, sino de cosas materiales: “hay virgencita, que ahora si nos llueva y nos paguen bien la cosecha, no como este año que nos fue de la tiznada”, “por favor, que el pinche de mi compadre me pague ya lo que le presté aunque no me pague los intereses, para que no me obligue a darle de balazos para que me devuelva mi dinero” “por favor virgencita, que este número de la lotería sea el premiado en el sorteo de navidad, ya sabes que si le damos al gordo, hay te llevo las flores de por vida y doy una limosna para la iglesia” y hay escuchaba más o menos esas peticiones y creo que por esas razones ese día que me llevó mi señor padre a comer gorditas de la villa y aguas de sabores y garnachas y caminamos mucho, pues vi o creí ver, a la virgen, llorando, pues ha de ser una desilusión que millones de gentes solamente lleguen a pedirle cosas y favores y no le recurren sus amores y sus rosas y sus milagritos o milagrones ni se pueda ver, con tranquilidad, la imagen que tanto ha guiado al pueblo mexicano, y por ello, la morenita, pues es la ley, y a lo mejor, digo, a lo mejor, porque no sé, pero por eso, AMLO, le puso MORENA a su grupo, y pues, le hizo el milagrote, y no sería malo que el día doce, lo viéramos, cuando menos, recorrer algunos metros para llegar con la morenita a la que debe de tener en muy alto, y darle las gracias por el milagrito recibido… pues que caray, nomás, con que cante, al final, no lo hace tan mal…tiene sus gracias…