Sin punto y coma

Sin lugar a dudas el poder desgasta, y cuando se ejerce de forma radical
desgasta más. Así de simple es la explicación que los doctrinarios de la Sociología imponen al fenómeno político para explicar la circunstancia del poder en cualquiera de sus manifestaciones, pero sobre todo, para entender la forma en que los protagonistas realizan su personal concepción en el proceso de la imposición de la voluntad personal a la voluntad colectiva. Pero también hay que señalar que este proceso en la mayor parte de las veces explica el determinismo en el ejercicio del poder.
 
 
Y esto viene a colación por la forma en que el Presidente de la Republica ha intentado cambiar la circunstancia  de la toma de decisiones para otorgarle una nueva identidad a su naciente estilo de gobernar, pero sobre todo, para imponerle un sello personal acorde a las aspiraciones colectivas de quienes reforzaron su movimiento por el Modelo aspiracional de una mal llamada “”cuarta transformación” que no es otra cosa que la pretendida diferenciación entre unos y otros para marcar un antes y el después.
El problema es que esa mal llamada “”Cuarta Transformacion” no tiene hasta ahora más doctrina que la simple diferenciación entre actores, porque no es una tarea fácil intentar el rediseño de un sistema político sin haber pasado por un proceso de aleccionamiento ideológico y doctrinario que permita a las masas al menos entender cuál es la ruta en la toma de decisiones, las fases del reacomodo ideológico, y los elementos de la unidad para alcanzar el propósito de caminar en el mismo sendero.
Andrés Manuel López Obrador ha sido un efectivo fabricante de paradigmas, y sabe cómo usarlos y utilizarlos en un propósito de índole política, pero el problema que se le ha presentado es el rechazo a los elementos que conforman su principal cuerpo de operadores gubernamentales a causa del desgaste histórico, y aunque ha intentado acudir a esos valores que antaño le dieron cohesión a sus principales causas, el desgaste ha sido mucho.
La rechifla que le endilgaron en la apertura de la temporada de béisbol en el nuevo parque propiedad de Alfredo Harp Helú fue el primer anuncio de que las cosas no están como las pensó cuando obtuvo el triunfo en la jornada electoral del año pasado. Fue un trago amargo aunque no lo haya querido aceptar, y no fueron los malquerientes, sino aquellos que han padecido las malas decisiones de inicio del proceso del cambio. La luna de miel ha terminado sin lugar a dudas, pero creo que no se ha dado cuenta.
 
Durante el desarrollo del Tianguis Turístico en Acapulco solamente fue aplaudido durante el evento de apertura, porque después la gente se abstuvo de mostrar su cordialidad. Desconozco la causa del enojo, pero ese hecho evidenció que las cosas están cambiando en la percepción de la y que en lo sucesivo deberá tener más cuidado con cada una de sus palabras, y desde luego que con el cumplimiento de sus promesas. Así de simple la circunstancia que vive por el momento el líder del Movimiento de Regeneración Nacional. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.