Especialistas, académicos y legisladores criticaron el llamado del Secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, a unirse al proyecto de la 4T

y trabajar en un mismo objetivo. Los mexicanos siempre hemos tenido un gran respeto por las fuerzas armadas de este país. Hasta ahora nos hemos enorgullecido por los actos que tanto el Ejército Mexicano como La Marina Armada de Mexico han desarrollado a lo largo de nuestra historia como nación. Para decirlo más claro, nuestras fuerzas armadas siempre han estado al lado de los mexicanos de todos los confines de este maravilloso país, que pareciera estar en peligro por el afán destructivo de implantar un nuevo régimen político en el que la permanencia en el poder es el principal objetivo. No podemos cerrar los ojos, y cada día comprobamos que es real el peligro de la instauración de una dictadura populista.

Pero también hay que señalar que existen hombres y mujeres que entienden la lealtad como un servicio político, y para eso están las leyes, para regular ese ejercicio político que está permitido a todos los mexicanos siempre y cuando no transgredan la letra Constitucional, y mucho menos las leyes que de ella emanan porque esa es la garantía de todo el pueblo que después de los movimientos revolucionarios de 1910 decidió consolidarse como un Estado Democrático en el que todos contamos con los mismos derechos y las mismas obligaciones. Si de algo podemos preciarnos es de los avances democráticos que nosotros mismos hemos edificado, y en cada jornada electoral seguimos ratificando ese destino común que hasta ahora hemos detentado.

La principal función de nuestras fuerzas armadas es la defensa del derecho que nuestra norma fundamental hipotética. Mientras tanto la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, nos concede la libertad para cohabitar de forma armónica en todo el territorio patrio. Pero también señala que las Entidades Federativas son libres y soberanas en su régimen interior, y por lo tanto nadie puede violentar esa soberanía hasta en tanto no exista una modificación constitucional que indique otra cosa. El Ejército Mexicano, y la Marina Armada de Mexico, son las instituciones cuya principal misión es hacer realidad esa armonía social coadyuvando en el mantenimiento de ese Estado Democrático y de Derecho que tanto tiempo y luchas entre hermanos nos ha costado.

Lo voy a decir con mucho respeto, pero como ciudadano mexicano que me he formado en las instituciones educativas del Estado, y donde he ejercido mi libertad de expresión durante toda mi carrera profesional en los medios de comunicación, puedo señalar que la nación, nuestra nación, ese Mexico que todos los días seguimos construyendo más de ciento veinte millones de mexicanos, está en peligro. Y lo digo con toda la responsabilidad de mi condición como ciudadano, porque las intentonas de construir un Estado que obedezca a directrices en las que el principal final es la precarización de la población para hacerlos dependientes de las dádivas gubernamentales, está en marcha, y eso quiere decir, que sin el consentimiento de nosotros, hay quienes ya están intentando traicionar a la Patria.

Siempre he tenido un gran respeto por nuestras fuerzas armadas que hasta ahora han sido las garantes de nuestra consolidación como una Nación Soberana, libre, independiente, democrática, y sobre todo, en la que todos somos iguales y tenemos los mismos derechos y obligaciones. Pero también tenemos la libertad de realizar expresiones que impacten en el ámbito del ejercicio político, con excepción de aquellos que por su condición de ser miembros de las fuerzas armadas tienen prohibido en la letra Constitucional. Para decirlo más claro, la lealtad única que debe tener un militar o un miembro de las fuerzas armadas es con el país y sus instituciones. “Los valientes no asesinan” fue una frase emblemática de Guillermo Prieto cuando pretendieron asesinar al presidente Benito Juárez en 1858. La declaración del Secretario de la Defensa Nacional es similar al la del Partido Comunista Chino, o a la del Partido Nacional Socialista, y eso es excecrable. Recordemos que el partido Nacional Socialista suplantó a Alemania.

Cuando un partido reemplaza a un país la consecuencia ha sido el autoritarismo, el fascismo o el Nacional socialismo, y los mexicanos no podemos permitirla, porque es la visión hegemónica de Andrés Manuel López Obrador. Sin lugar a dudas, si Luis Crescencio Sandoval no se disculpa por ese desatino, quiere decir que el siguiente paso es la Dictadura comunista en este país. “Comete delito de Traición a la Patria quien realice actos contra la independencia, soberanía o integridad de la Nación Mexicana, con la finalidad de someterla a persona, grupo o gobierno extranjero”. El Artículo 17 de la Ley de Disciplina del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos señala: ““Queda estrictamente prohibido al militar en servicio activo, inmiscuirse en asuntos políticos, directa o indirectamente, salvo aquel que disfrute de licencia que así se lo permita en términos de lo dispuesto por las leyes…”Hacer un llamado así a los mexicanos es traición a la Patria”, que se no se le olvide General Luis Crescencio Sandoval.

Al tiempo.

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Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.