sinpunto

La Secretaría de Gobernación publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación el Reglamento de la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas de estos Delitos. Hoy entró en vigor y me parece que finamente es uno de los instrumentos más valiosos para combatir uno de los modernos flagelos que ha inventado el hombre para explotar y esclavizar a sus semejantes, sobre todo en tratándose del género femenino.

La Comisión Intersecretarial en coordinación con Gobernación y la Procuraduría General de la República tendrán ahora 90 días hábiles para elaborar el Modelo de Asistencia y Protección a Víctimas.

Nuestra realidad indica que este tipo de delitos es una muestra de nuestro poco aprecio social por la seguridad y bienestar de los demás. Tardamos miles de años en darnos cuenta que el ejercicio de la prostitución o el sexo servicio están ligados estrechamente al delito de la trata de personas, o para decirlo mejor, durante mucho tiempo evitamos abordar el tema por los intereses que tradicionalmente se han movido en torno a la explotación sexual del género femenino. Mucho es el dinero que quienes se involucran en este negocio obtienen a cambio de dejar a un lado los principios, y eso que llamamos o conocemos como sentido de la humanidad. Pero eso también sirve para comprobar que el amor por el dinero está muy por encima de cualquier indicio de solidaridad que debiéramos obligadamente sentir por cualquier semejante.

Pareciera que la modernidad se ha convertido en el mejor aliado de la trata de personas, porque cada día se refinan más los mecanismos que los lenones utilizan para la explotación sexual. Cuando Miguel Ángel Mancera anunció que después de arduas investigaciones se había desarticulado una banda dedicada a la trata de personas en la zona de La Merced, particularmente en la calle de Toltecas, entendí la mendicidad humana, porque por lo menos hace cuarenta años que en esa zona se realiza el sexo servicio, y cualquiera que se precie de conocer la ciudad sabe qué lugares existen. Es más, hay una familia “Zacatero” que de eso ha hecho una considerable fortuna, y las autoridades nunca los han molestado.

Pero también me resulta incomprensible que las autoridades administrativas de cualquier lugar de la república consientan la comisión de este tipo de delitos sin hacer absolutamente nada. Las Delegaciones Políticas de Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo, Benito Juárez y Venustiano Carranza, que forman parte del territorio que fue de La antigua Ciudad de México, están infestados de lugares en que se practica la explotación sexual y no pasa nada. Solid Gold, Mens club, Angus, y tantas otras marcas del mismo estilo son referencias para cualquier miembro del sexo masculino, de diversión femenina. El cinismo es brutal entre los gobernantes, por eso no pasa nada, porque las complicidades están a la orden del día. La vida de un semejante poco aprecio les motiva a los políticos de este cuño. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.