México, 4 de agosto de 2025 ::: Durante las grabaciones de “El rey”, la biografía no autorizada de Vicente Fernández para Televisa,

Angélica Aragón en su personaje de periodista, le preguntó al de “Chente” por qué trataba a las mujeres como muebles, un caballo o su rancho, como si fueran de su propiedad.
 “¡Pero eso no está en el libreto!”, le dijo rápidamente el actor Salvador Sánchez, responsable de darle vida al Charro de Huentitán en la parte final de su vida. “Sí, no está, pero contesta”, reviró Aragón.
La decisión de la actriz, que recién cumplió 72 años, simplemente obedeció a algo que ha enarbolado prácticamente durante toda su carrera: el respeto a las mujeres en la vida real y, por ende, en la ficción también.
Su momento televisivo fue en 1997, cuando optó por dejar una presunta comodidad de Televisa y aceptó la invitación de TV Azteca para protagonizar “Mirada de mujer”, en la que interpretó a alguien de 50 años que, pese a la resistencia social, inicia una relación con alguien joven.
“Era en aquel momento cambiar la perspectiva y fue importante, porque hasta en la revista 'Times’ nos dieron portada con el titular rompiendo tabús”, recuerda Aragón.
Así, durante su trayectoria de cinco décadas, ha sido la mujer revolucionaria apoyando al Ejército mexicano durante la invasión francesa en “5 de mayo, la batalla”; otra dentro del poder religioso en “El crimen del Padre Amaro”; una madre divertida en “Treintona, soltera y fantástica” y una madame respetada en “El águila y el gusano”.
Ahora forma parte de la puesta en escena “Las Leonas”, en la cual, junto con Victoria Ruffo, Mara Patricia Castañeda y Lupita Jones, encarnan a una serie de profesionistas que reflexionan sobre su vida. Y ahí, como ha hecho varias veces, ha metido su cuchara en pro de la mujer.
“El personaje de 'Mara’, que es abogada, dice que es la que llega más temprano y sirve el café, pero también la que menos gana”, cuenta.
“Y hasta ahí era el chiste, yo agregué, metiendo a Shakira, que aunque digan que las mujeres ahora no lloran, facturan, de las que facturamos únicamente el 7% maneja su propio dinero, las demás van con el hijo, el marido, el hermano para que le digan en qué invertir y todavía le agregué algo de Christine Lagarde, presidenta del Banco Mundial, de que en todo el siglo XXI no vamos a lograr la equidad de salarios, lo cual es real y preocupante”, apunta.