La Ciudad de México se convitió en la capital mundial del reguetón con la llegada de Vibras Fest 2025,
un festival se inscribió en la historia de los grandes espectáculos urbanos. Fue el sábado 27 de septiembre, a partir de las cuatro de la tarde, el Estadio Fray Nano, en la alcaldía Venustiano Carranza, que se transformó en un epicentro de beats, calle y estrellas, donde la música no solo sonó: explotó.
El cartel fue, sencillamente, de lujo. Tito El Bambino, leyenda viva del género, trajo consigo himnos que han marcado generaciones; Cosculluela, con su estilo callejero y su lírica filosa, encendió la noche; mientras que Bryant Myers, figura indiscutible del trap latino, sacudió las emociones con esa crudeza que lo distingue. A ellos se sumaron Luar La L, Jon Z, Kevin Roldán, Almighty, Dálmata, Fariana y Ovi, además de talentos como Yayo el Master, DJ Bulbo, DJ Rockwell, CJ Criss x NFTA y DJ Pereira. Un cartel que reunió tanto a pioneros como a nuevas voces, un mosaico de estilos y acentos que garantizaron una jornada inolvidable.
Más que un festival, Vibras Fest 2025 será un manifiesto sonoro y cultural. Un punto de encuentro donde convergen las historias del barrio con el eco global de un género que conquistó al mundo. Desde el reguetón clásico hasta el trap más actual, pasando por fusiones que vibran en las calles digitales, esta edición se perfila como el nacimiento de una leyenda en la Ciudad de México: la de un festival que se distingue por su seriedad, reputación y dedicación a generar emociones auténticas.
El Fray Nano se convirtió en la meca del flow, en un santuario del perreo, en un templo donde cada beat fue un latido colectivo. “Que vengan las estrellas, que vibren las bocinas, que suene el reguetón”: así se anunció este encuentro, dispuesto a marcar un antes y un después en la historia de los festivales urbanos de la capital.