EEUU, 29 enero 2023 —La relación que establecemos con el alimento en el marco de nuestra cultura, hiper acelerada y desconectada de la

tierra y de los procesos de producción de los alimentos, suele distraernos del momento presente y desconectarnos de aquello que realmente buscamos saciar cada vez que comemos. ¿Por hambre, ansiedad o por qué simplemente porque es "hora de comer"?

Es probable que durante el día esta pregunta ni siquiera suceda porque todavía nos gobierna otro modo de accionar: comer rápido para saciar el hambre y seguir con otra cosa.

Para contrarrestar la velocidad y desconexión que ocurre en el vínculo con el alimento, surge la Mindful eating o alimentación consciente. Según la ONG Mindful, la Mindful eating nace de la filosofía del mindfulness, la cual hace referencia a la consciencia que surge al prestar atención de manera intencional al momento presente y sin emitir juicios de valor. En esta línea, la alimentación y el vínculo que se establece con ella se basa en la práctica de la atención plena para aumentar el nivel de conciencia sobre las sensaciones de hambre y saciedad, con el objetivo de establecer una relación saludable con la comida.

Algunas corrientes, también consideran que nació para contrarrestar, de alguna manera, a la cultura de la comida rápida (fast food). Aprender a reconocer los pensamientos que tenemos vinculados con la alimentación nos permitiría discernir entre aquellos que fueron adquiridos por costumbre familiar o por alguna situación emocional en particular, y aquellos que tienen bases más profundas (o conscientes).

- Cuatro diferencias básicas: Hambre físico vs deseo mental-

- Se siente gradualmente vs se siente repentinamente
- Se siente en el estómago vs es mental
- Se desea cualquier alimento vs se desean cosas específicas
- Es fácil de satisfacer vs es difícil de satisfacer

- Mejorar la relación con la comida -

La alimentación consciente o intuitiva, busca poner plena a la nutrición, a los alimentos qué escogemos y en los requerimientos y tiempos de cocina que cada uno precisa. De donde vienen, cómo fueron obtenidos y cuánto tiempo precisan para ser digeridos luego de ingerirlos también son pautas que corresponden a este movimiento. Se puede empezar en cualquier momento, incluso en la infancia.