(IMO 9373917, LBR), anclado en Douala, una ciudad del suroeste de Camerún, e hicieron rehenes a cuatro miembros de la tripulación, entre ellos algunos ucranianos, tras apoderarse de objetos de valor.
Hasta el momento se desconoce el paradero de los marineros hechos rehenes, que fueron llevados en dirección desconocida, dijo la agencia ucraniana Ukrinform.
El Centro de Información Marítima confirmó con base en reportes de los familiares de uno de los marineros que hay "ucranianos entre los rehenes".
Los primeros informes sobre el incidente se transmitieron de inmediato al Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, así como al cónsul de Ucrania en Nigeria, indicó Ukrinform.
A la familia se le ofreció la asistencia de especialistas y se le brindó todo el apoyo posible. A partir del 2 de abril de 2019, el barco estaba amarrado en el puerto de Douala.
El buque construido en 2007 es propiedad de una empresa griega.