Incierto 2017

SINGLADURA

Conforme avanza el cierre del 2016 crecen las dudas e incertidumbres en varios flancos del país sobre el 2017, un año que se prevé desde ahora “difícil” para el país, según palabras del propio presidente Enrique Peña Nieto.

En tierras michoacanas, Peña Nieto anticipó “un año difícil en términos de gasto público”, cuyos recortes se harán sentir desde el primer trimestre del 2017.

Recién en la víspera, Peña Nieto ratificó en un encuentro de gabinete para examinar los retos en la última parte de su sexenio, quizá la más complicada, que se requiere un uso más eficaz y eficiente de los recursos públicos para mantener la estabilidad macroeconómica del país.

En Los Pinos, se revisaron los avances en las distintas acciones que llevan a cabo las dependencias gubernamentales para la implementación de las reformas estructurales.

El jefe del Ejecutivo instruyó a sus colaboradores a planear acciones con vistas al tercer tercio de su administración, y reiteró que su gobierno continuará con la disciplina presupuestal que permita mantener la estabilidad macroeconómica, que genere mejores condiciones de bienestar para los mexicanos.

Pero el punto es que los mexicanos enfrentaremos un inicio de año complejo como consecuencia de un alza al precio de los combustibles, fruto de la reforma energética y la liberación del mercado de los combustibles, en un entorno internacional de precios petroleros a la baja, aún éstos puedan tener como lo han hecho algunas leves mejorías.

El alza de los combustibles en el mercado interno seguramente repercutirá en un incremento inflacionario, que de hecho ya inició y se acentuará antes de que termine el año debido a las derramas económicas y el apetito del comercio organizado e informal por hacerse de más recursos a costa de los consumidores, que seguramente empeñarán su resto antes de que en 2017 sea imposible, según todas las previsiones. Ya lo veremos.

Añádase a este escenario “difícil”, las magras previsiones de crecimiento de los diversos organismos económicos, expertos y aún del Fondo Monetario Internacional (FMI), que ya está listo para tender un puente financiero de auxilio a la “boyante” economía mexicana hasta por unos 80 mil millones de dólares, cualquier baba de perico como dirían los economistas de antes.

Peña también previno que en términos de gasto público 2017 será difícil. Después de todo, admitió, los recursos del gobierno no son un barril sin fondo ni una bolsa de la que pueda salir todo el dinero que sea necesario como algunos suponen o pueden presumir.

Sume usted afable lector (a) que el país mantiene como telón de fondo un escenario persistentemente violento y cargado de impunidad. Las cifras de criminalidad no ceden y son de todos conocidas, pero además, se añade la voracidad de políticos como los ex gobernadores Javier Duarte y Guillermo Padres.

Crimen e impunidad siguen lacerando a los mexicanos como en los mejores tiempos, pero ahora el punto crítico es que se trata de tiempos malos.

Y si quiere usted añadir algo. Recuerde que en 2017 se jugará el Estado de México, la entidad natal nada menos que del presidente Peña y la antesala de la disputa por el poder presidencial,. Ambos factores, claro, son potencialmente incendiarios. ¿O no?  Amanecerá y veremos. Pero lo cierto es que viene “difícil” el 2017.

This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.