sin precedentes contra líderes del Cártel de Sinaloa, marcando la primera vez que se les imputa por cargos de narcoterrorismo y apoyo al terrorismo en relación con el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.
A través de un comunicado mencionaron que entre los principales señalados están Pedro Inzunza Noriega y su hijo Pedro Inzunza Coronel, quienes, de acuerdo con las autoridades estadounidenses, son cabecillas de la Organización Beltrán Leyva (OBL), una violenta facción del Cártel de Sinaloa, considerada la mayor red de producción de fentanilo a nivel mundial.
Además de narcotráfico y lavado de dinero, ambos enfrentan cargos por liderar operaciones que han enviado cantidades masivas de fentanilo, cocaína, metanfetamina y heroína a Estados Unidos.
Esta acusación se sostiene directamente con la Orden Ejecutiva 14157 emitida por el presidente Donald Trump y en la cual designó al Cártel de Sinaloa como una Organización Terrorista Extranjera. Pamela Bondi, fiscal general, declaró que se buscará la cadena perpetua para los acusados.
Por su parte, el fiscal federal del Distrito Sur de California, Adam Gordon, destacó que estas acciones forman parte de la Operación Take Back America, enfocada en erradicar la amenaza del narcotráfico como un “cáncer” dentro del Estado.
“Estos criminales propagan violencia, corrupción y miedo. Esta acusación es una muestra de justicia y determinación para erradicar su influencia”, afirmó Gordon.
Además de los Inzunza, otros líderes de la OBL enfrentan cargos similares, incluyendo a Fausto Isidro Meza Flores (“Chapo Isidro”), Óscar Manuel Gastélum Iribe (“El Músico”) y otros miembros señalados por su papel clave dentro del cartel.
Las autoridades también mantienen casos abiertos contra otros jefes del Cártel de Sinaloa como Iván Archivaldo Guzmán Salazar (“El Chapito”), Ismael Zambada Sicairos (“Mayito Flaco”) y José Gil Caro Quintero (“El Chino”).
Esta es la primera acusación formal presentada por la recientemente creada Unidad de Narcoterrorismo del Distrito Sur de California, establecida tras la llegada del fiscal Gordon en abril de este año.