Opinión

sinpunto

En este país existe una cultura muy arraigada que habla de la proclividad de los servidores públicos para violentar las disposiciones legales que regulan el marco de sus responsabilidades. Para decirlo de una forma más asertiva, los funcionarios públicos saben distinguir muy bien que pueden y qué no pueden, pero antes que pensar en el cumplimiento estricto del marco legal visualizan la forma de evitar su cumplimiento. Es una cultura generalizada que muestra la infinita capacidad de los funcionarios públicos para identificar nichos de oportunidad para el desarrollo de los actos de corrupción.

loblanco

Uno de los asuntos más trascendentes que dejara pendiente la legislatura pasada,  sin duda es la Reforma Política del Distrito Federal, misma que fue usada como vehículo de negociación por las distintas bancadas y que días antes de su turno para discusión fuera congelada, desatando a causa de ello, comentarios que enfatizaban algún tipo de chantaje.

SINGLADURA

Primero fue la hazaña, anunciada en septiembre último con fanfarrias –faltaba más- por el titular del trabajo, Alfonso  Navarrete,  de homologar el salario mínimo nacional para llevarlo a 70.10 pesos por jornada laboral diaria un mes después.

gente normal

El próximo día 1º de enero de 2016 será un día histórico para la Televisión, en primer término, porque el Apagón Analógico concluirá –no sé si satisfactoriamente o no, pero bueno…- para dar paso a la Televisión Digital y además porque hace su

sinpunto

Este país tiene muchos años convertido en un cementerio. Los criminales iniciaron una etapa en la que la impunidad se ha impuesto a causa de la carencia de resultados entre las autoridades encargadas de la seguridad pública, lo que evidenció la forma en que nuestros gobernantes colocaron sus prioridades en otros rubros, con lo que la criminalidad comenzó a realizar sus acciones contra los ciudadanos abandonados por las instancias que debieran protegerlos. No es fácil afirmar lo anterior, pero es lo que a pesar nuestro ocurrió hace muchos años y que ahora lamentamos, aunque también exigimos a quienes tienen que resolverlo, quienes por cierto no son los mismos que lo iniciaron.