EL ACTO DEL CORPUS CHRISTI
(Dios ha distinguido al ser humano en la cruz de su Hijo, robusteciéndole en los trayectos existenciales ―incluso cuando esas rutas están desbordadas de angustias ― mediante el símbolo de la Nueva y Eterna Alianza, esto es, con el aliento/alimento de su Cuerpo y de su Sangre)