A ti, a ti, a ti, a ustedes… gracias
Quizá usted lo conoció. Déjeme le platico.
Se fue poco a poco, como una gota que se convierte en río infinito y deja huella a su paso, libre, fresca, dulce, que sacia sed sin distingos.
Información útil para la toma de decisiones
Quizá usted lo conoció. Déjeme le platico.
Se fue poco a poco, como una gota que se convierte en río infinito y deja huella a su paso, libre, fresca, dulce, que sacia sed sin distingos.
A mi hijo, el guerrero Moy que lucha nuevamente…
Se fue sin avisar; ni una tarjeta ni una llamada.
Nada en la víspera que anunciara su viaje y, para mal de ausencias, la pandemia lo alejó de eso que Alfredo Jiménez llamó el bullicio y la falsa sociedad, por ser hijo del pueblo.
Mi madre se fue temprano, Yaz también; en el breve tiempo que una y otra me compartió, con estilo propio me enseñaron a ser libre pensador, no envidiar el éxito ajeno y privilegiar el respeto a las mujeres.
--¡Ahí vienen esos pinches muertos de hambre!-- exclamó un distinguido diputado en uno de esos días de la LXVIII Legislatura federal, cuando se percató que se dirigían a él reporteros de la fuente legislativa.
¿La 4T es una faramalla? ¿Su Alteza Serenísima es una persona faramallosa?
¿Qué no anda en campaña Su Alteza Serenísima? Bueno, bueno, fiel a su afición que data de la infancia, sin rubor ya hasta parafrasea al mítico beisbolista estadunidense Babe Ruth, retirado en 1935: “No se puede vencer a quien no sabe rendirse”, citó en la mañanera y sustanció: “Nosotros llegamos aquí