LOS PRIMEROS CAMBIOS DE LA REFORMA ENERGETICA

loblanco   

 Sin lugar a dudas, de las reformas constitucionales alcanzadas en 2013, la relativa al  sector energía representa la de mayor trascendencia para la nación mexicana.  No es  casualidad que la discusión y aprobación de sus leyes secundarias se haya postergado al último periodo extraordinario aprobado por la Comisión Permanente en turno;  al

momento, las cuatro minutas que fueron enviadas por el Senado han sido avaladas ya por la cámara de Diputados Federal, es cuestión de días para que la reforma comience a hacerse un hecho.

     Ahora bien, dentro del análisis que la  Cámara Baja  ha realizado sobre éste, ha surgido un tema que ha dividido a la opinión pública, como era de esperarse, me refiero a los pasivos de PEMEX y de CFE, entendidos éstos como el recurso que cualquier empresa debe tener para poder hacer frente y pagar las prestaciones y pensiones de sus trabajadores al final de su vida laboral, en efecto, la comisión de energía de la cámara correspondiente ha aprobado que el Gobierno Federal absorba parte de los mismos,  y a cambio se ha solicitado a Pemex Y CFE  cambiar a más tardar en un año el régimen de su contrato colectivo de trabajo, por uno en el que las pensiones y/o jubilaciones los nuevos trabajadores de estas empresas sean financiadas bajo parámetros de cuentas individuales, dando pauta a la transición del Sistema de Ahorro para el Retiro, en otras palabras, convertir a estos organismos en “empresas productivas del Estado” como se tiene previsto requiere sanearlas y por ende ésta limpia debe de comenzar por sus finanzas.

     Naturalmente la noticia de la deuda ha llegado  a “la izquierda mexicana representada en el Congreso  como  el “PEMEXPROA”, haciendo alusión al rescate bancario de los noventas del siglo pasado,  ya el monto asciende a 1.5 billones de pesos.

     PEMEX y CFE requieren eficientarze; la decisión representa el darle la posibilidad a estas empresas de transformarse en competitivas y así poder hacer frente a cualquier otra de las que seguramente vendrán con la apertura que propone la reforma energética, la decisión en análisis, pone en condiciones de un verdadero crecimiento y principalmente, se evidencia que el Gobierno en turno ha decidido al fin comenzar a resolver un problema que estuvo ahí y que con complicidad fue relegado. Hoy son reformas que sentarán las bases para generar mayor competitividad y productividad a Mexico.