La esperanza priista

Todo haría suponer que el PRI está condenado al fracaso en este sexenio, que los verdugos que ejecutarán a Lozoya y Duarte colgarán sus cabezas en picota para ser mostrados a la comarca como triunfo de los caballeros de la mesa de la 4T en contra de los “Orcos de la corrupción”. Mencioné ayer que este PRI es un verdadero traje a la medida, mejor dicho,es una guayabera muy cómoda para el Presidente.

 Regresare dos líneas atrás de esta sentencia y diré que el tricolor podría regresar a la pelea, tiene a un par de figuras, la más fuerte y que se asoma como una de las mejor colocadas en el imaginario de los resultados, hablo del gobernador del estado de México, Alfredo del mazo maza, y si, se antoja como un arranque tempranero, no debemos perder de vista que el jefe estatal es capitán de una de las maquinarias más aceitadas del sistema político mexicano, no es un chiste, gobierna a más de 16 millones de seres humanos y su capacidad electoral es superior a el de la CDMX.

Veamos algunos aspectos que llenarían el ojo en un arrancadero priísta, hoy por hoy muy desmejorado: Alfredo del Mazo fue de los pocos que en su momento se desmarcó de el que era entonces presidente del país, siendo del mazo candidato a la gubernatura marco línea muy separada de su pariente, un hecho que lo apuntaló frente a el crecimiento de la candidata de morena Delfina, quien por cierto no ha podido consolidarse en su estado, es más, morena ha sufrido para echar raíces en la tierra de Adolfo López Mateos y de un sin fin de políticos de alto calibre.

Vemos en el actual jefe de estado mexiquense la ventaja de la paciencia, pues ha capoteado temas como el covid-19, claro, con grietas en sectores como el de la seguridad, pero más en la línea de los resultados positivos, digo, si comparamos con Aguascalientes, Guanajuato, Jalisco o Tamaulipas, regiones que representan ser un trabuco para los sistemas de seguridad e inteligencia federales, con el Edomex no es así, no deja ser un azulejo con muchos rostros y de muchas sociedades, pero en algún momento se apostó a qué el Edomex caería a pedazos en medio de la pandemia, el trabajo de coordinación y hasta de madurez política con la jefa de gobierno Claudia Sheimbaum coloca a del Mazo como un político eficiente, discreto, moderno.

Y para que del Mazo avance en un proyecto mayor requerirá de el divorcio político, uno real, de todo lo que huela a el pasado sexenio, no asumir que se excedieron lo colocaría en una posición penosa, tal y como sucede con el dirigente de ese partido ALITO, fiel guardián de los intereses de Peña y AMLO.

Alfredo del Mazo puede dar un campanazo, construir una candidatura a la altura de lo que muchos mexicanos no encuentran en el gobierno federal, diría que junto con Enrique de la Madrid, son las cartas más poderosas que el PRI cuenta, solo que les tocará demoler ese edificio montado sobre la simulación y los pactos con la 4T y hacer lo que a muchos políticos les cuesta: reconocer que cometieron errores, marcar una ruta de salida para el País, dejar en claro que tipo de visión poseen, regresarle la dignidad y estatura a el arte de la política, vamos, las semillas en suelo mexiquense podrían dar la sorpresa.