El fantasma del fracaso

Sin punto y coma
Pareciera que la mal llamada “Cuarta Transformación” no tiene pies ni cabeza
por la carencia de un proyecto viable, practico, alcanzable y medible, para conocer los avances tanto en la adecuación de las leyes como en la eficacia y eficiencia de quienes se montaron en los principales cargos gubernamentales y legislativos. Hasta ahora lo que se realiza en el ámbito de la elaboración de las leyes y de los proyectos de gobierno, no encuentra compaginación en la forma en que se opera desde las dependencias del Gobierno Federal.
 
 
Para decirlo más claro, en el Congreso llevan prisa por diseñar ordenamientos legales acordes a lo que tanto predicó durante muchos años quien ahora detenta la Primera Magistratura, pero el problema es que ese diseño no va en el mismo sentido de quienes tienen la tarea de la operación gubernamental, y están entrampados en una marabunta de disposiciones entre lo legal y lo administrativo con muy poca concordancia, aunque en la mayor parte las leyes y reglamentos hayan sido realizadas con la mejor intención.
El problema es que las ocurrencias y los caprichos se han colocado por encima del proyecto, y en ocasiones han surgido descabelladas propuestas por el afán de protagonismo de quienes pretenden hacerse necesarios para que el bien amado camarada líder los pueda observar, y por consecuencia evaluar y calificar positivamente sus aportaciones al proyecto de cambio de las realidades del país. El problema es que no existe un plan maestro y mucho menos metodología, y todo se realiza con ocurrencias de momento.
El problema es que entre esas ideas descabelladas de la pretendida “”Cuarta Transformación”, también existen descabellados desplantes, y uno de ellos pudiera causar un brutal efecto de impunidad y agresiones al tejido social en el país. Ahora nuestros ilustres políticos han decidido conformar una serie de cuerpos de milicianos par que se encarguen de la defensa del proyecto de transformación encabezado por Andrés Manuel López Obrador, quien hasta ahora ha guardado silencio ante la descabellada propuesta.
Y lo peor de todo es que ese intento pasará a formar y conformar el catálogo de ocurrencias que se han venido sucediendo vertiginosamente porque todos quieren aportar a esa mal llamada “Cuarta Transformación” que hasta ahora no tiene pies ni cabeza. El gran misterio es hacia dónde pretende caminar el Presidente Andrés Manuel López Obrador, porque pontificar todos los días ante los medios de comunicación no es marcarle la agenda al país, y mucho menos al gobierno porque hasta ahora las propuestas de cambios no se han materializado.
 
Algunos especialistas han comenzado a vislumbrar una difícil etapa en la Planeación del quehacer gubernamental ante la eventualidad de que muchos funcionarios de alto nivel han mostrado y demostrado incompetencia, carencia de conocimientos y hasta displicencia a la hora de tomar decisiones. Lo deseable es que el propio Presidente de la República deje sus paseos por tierra y su tour culinario de todos los días en las fondas camioneras para aventurarse más en el escudriñamiento del diseño de ese proyecto que pretende implantar, porque hasta ahora sus operadores han fracasado rotundamente. Al tiempo.
This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.