EL AVIÓN Y EL BASURERO DE LA HISTORIA

Sin lugar a dudas el mayor y más experto contador de historias es el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos. Todos los días lo hace, todos los

días lo sigue ensayando, y todos los días los mexicanos le creen y piensan que en realidad es el mejor hombre para dirigir los destinos de este hermoso y atribulado país. Lo que no se han dado cuenta es que Andrés Manuel López Obrador es el mayor charlatán que ha dado este país, y que es un experto en exaltar logros pírricos y minimizar las grandes fallas de su gobierno.

Hasta ahora las cosas no marchan como las dice, porque la realidad es lacerante en materia de gobierno donde las decisiones se toman al calor de las ocurrencias tempraneras, y el adoctrinamiento se convierte en la prédica de todos los días en lo que los medios de comunicación han denominado “"la mañanera”, que no es otra cosa que un vacuo soliloquio con el que el Presidente de la Republica engaña a los mexicanos de todas las latitudes con reseñas inexistentes, presuntas acciones realizadas sin comprobación, y fáciles promesas de toda índole que le otorgan un dejo de popularidad que al fin y al cabo saldrá muy caro a los mexicanos cuando se tengan que enfrentar a la lacerante realidad de país que nos está construyendo.

En otro ejercicio de esa comedia que podríamos intitular “"Atole Con El Dedo Mañanero”, el dicharachero y mentiroso Presidente de la Republica, vulgarmente conocido como el “Peje”, anunció nuevamente la rifa del avión presidencial a través de un sorteo organizado por la Lotería Nacional Para La Asistencia Pública, con la finalidad de obtener tres mil millones de pesos para comprar equipo médico. Por lo pronto la rifa será realizada en el mes de septiembre para dar tiempo a los interesados de comprar un “cachito”.

Como ha repetido hasta la saciedad el propio mentiroso Mandatario, la aeronave no será entregada al ganador, porque lo que se rifará será una bolsa de dinero equivalente al valor comercial del presunto avión que no se puede rifar porque no es propiedad del país, sino una aeronave adquirida mediante un “"arrendamiento financiero” cuyo mecanismo no es otra cosa que pagar una cantidad mensual por el uso, goce y disfrute, y una vez que se pague el total de su costo, el Estado Mexicano podrá disponer enteramente de la aeronave.

Para decirlo con todas sus letras, lo que en realidad hace el Presidente de la República es la organización de un sorteo con el que les dará atole a los mexicanos que piensan y creen que en realidad el publicitado evento es para que todos los participantes sean felices. Lo que no entienden es que el charlatán que habita en Palacio Nacional esta engañando, como siempre lo ha hecho, a los mexicanos que le creen a pie juntillas aquello de que pueden detentar en propiedad un avión.

No es la primera vez que el señor López Obrador juega con las ilusiones de los mexicanos más empobrecidos de todo el país, siempre lo ha hecho en su peregrinar cotidiano de los últimos años sembrando odio contra sus adversarios y esperanza en los incautos que lo encumbraron políticamente, y que no han recibido a cambio más que sinsabores y decepciones. El engaño que ha construido el Presidente de la Republica es monumental, pero nunca las mentiras permanecen incólumes, por el contrario, en la mayor parte de las veces lo que provocan es un desastre.

Hasta ahora ese desastre se observa por todos lados, pero hay quienes no se quitan la venda de los ojos porque su esperanza sigue siendo enorme. El encantador de incautos seguirá teniendo éxito en función de que sepa mantener al engaño como Institución, y aunque ha demostrado ser un experto, también hay que señalar que ente más grande sea la mentira, mayor será el desastre que provocará y muchos los odios que propiciara. El basurero de la historia estará a la vuelta de los siguientes cinco años. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.