El Pigmeo Ibarra

El presunto ladrón y periodista, y digo presunto porque no es periodista, sino un mercenario, aliado de Andrés Manuel

López Obrador, y que lleva por nombre Epigmenio Ibarra, protagonizó un nuevo episodio negativo, luego de que enfrentara al reportero de Latinus, Arturo Cerda, quien de forma respetuosa le solicitó una entrevista, pero el imbécil y arrastrado deudor de ciento cincuenta millones de pesos al erario del país, se negó a contestar.

Y es que ese es el tema que abordaría el Reportero, pero la soberbia del presunto productor estuvo por delante de la razón. Epigmenio Ibarra se siente “parido por Dios” simplemente porque ha hecho fama como Productor, pero como persona, no puedo más que señalar que es un desecho de la humanidad por esa infinita soberbia que adquirió desde que se sumó a la mal llamada Cuarta Transformación.

Pero como dicen por ahí, no hay plazo que no se cumpla, y que bueno que disfrute de lo que le queda de vigencia al actual régimen, porque puede tener la seguridad de que lo que se ha robado, porque sus estúpidas entregas que ha hecho han sido eso, un robo a las arcas públicas, porque es un miserable arrastrado que piensa que la mal llamada cuarta Transformación seguirá siendo gobierno, pero sus cálculos están muy por debajo de la realidad.

Cuando un sujeto se siente empoderado, de inmediato se coloca la careta de “divo”, y cuando el reportero Arturo Cerda le pidió de forma respetuosa una entrevista al Pigmeo Ibarra, claro que no quiso contestar, porque el motivo de la entrevista era platicar cuando pagaría en millonario préstamo que le hizo el país, por instrucciones de Andrés Manuel López Obrador, lo que si es un asunto importante porque es dinero de los mexicanos.

Yo no se que es lo que piensa Epigmenio, pero puede tener la seguridad de que no tendrá trabajo en la esfera gubernamental los siguientes seis años, porque le debe quedar muy en claro que los mexicanos de todas las latitudes aborrecemos todo,lo que huela a Andrés Manuel López Obrador porque nos hemos dado cuenta de que no ha sido un presidente, sino un ladrón de siete suelas.

Por lo que a mi respecta, el pedazo de imbécil que se dice llamar Epigmenio Ibarra, puede irse reptando para jeringarle la borrega al estúpido Presidente y a Doña Gárgola, pero puede tener la seguridad de que si un día me lo encuentro, le gritaré en su cara lo que vale y lo que se merece, porque no vale ni un comino como persona, y lo único que se merece es un par de bofetadas. Así de simple. Al tiempo.

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Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septién. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con cincuenta años de experiencia en diversos medios de comunicación.