Oposición ¿para qué?

El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela acaba de propinarle un mazazo a María Corina Machado, la principal

figura de la oposición al gobierno del presidente Nicolás Maduro, esto al negarle el levantamiento de una inhabilitación por 15 años, lo que la pone virtualmente fuera de las próximas elecciones venezolanas, si es que éstas se realizan este año conforme a los acuerdos de Barbados que ambas partes firmaron en octubre pasado bajo el auspicio de varios países, Noruega y Estados Unidos entre ellos, pero que hoy están en el limbo.

La sentencia del máximo tribunal, permanentemente fiel al madurismo a través de sus veredictos o fallos, constituye en los hechos la eliminación de la adversaria política más empoderada que en los últimos años haya tenido ese país sudamericano. Es claro que el poder no admite competencia y si la hay, pues la elimina y punto.

Corina arrasó en octubre pasado en unas primarias que, ante el bloqueo gubernamental, fueron auspiciadas prácticamente por un pueblo cansado de 25 años de chavismo, aun y cuando inicialmente respaldó de manera tácita y más tarde incluso en las urnas el intento militar que en febrero de 1992 encabezó el comandante Hugo Chávez Frías, muerto por un cáncer en 2013, y que se erigió en el adalid del pueblo e instaurador de la República Bolivariana de Venezuela.

Suscritos recién en octubre de 2023 por el gobierno de Maduro y la oposición, los denominados Acuerdos de Barbados abrieron la expectativa de que Venezuela por fin podría tener este año comicios competitivos, libres e imparciales.

El primer acuerdo parcial establecía la promoción de derechos políticos y electorales, mientras que el segundo, que firmaron el presidente Maduro y la Plataforma Unitaria, aludía "a la protección de los Intereses vitales para la nación"

Pese a estos acuerdos, el gobierno de Maduro argumentó recién la semana pasada que la oposición mantiene un “patrón” de violencia y espera una declaración de la delegación negociadora opositora en los acuerdos de Barbados, a quienes entregarán pruebas sobre presuntos planes conspirativos.

Maduro dijo el jueves pasado que los acuerdos firmados con la oposición en Barbados “están heridos de muerte”. Añadió: “Hoy los acuerdos de Barbados están heridos de muerte, los declaro en terapia intensiva, ojalá podamos salvar los acuerdos de Barbados, sin planes para asesinarme”. Esto no fue todo.

Antes, el titular de la delegación oficialista en las negociaciones, Jorge Rodríguez, apuntó la fragilidad del acuerdo, pero sobre todo echó por tierra la posibilidad de que Corina Machado, pudiera inscribirse en las próximas elecciones presidenciales.

“No hay manera de que esta mujer sea candidata a nada en ninguna elección en la República Bolivariana de Venezuela", dijo durante una sesión en la Asamblea Nacional (AN) de mayoría oficialista que preside, en la que aseguró que Maduro será el candidato en los comicios presidenciales.

Rodríguez también increpó a Brian Nichols, secretario adjunto del Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental, quien se mostró “profundamente preocupado” por las acciones contra la oposición y la sociedad civil en Venezuela, tras las órdenes de arresto contra periodistas, activistas y militares, presuntamente implicados en las conspiraciones.

El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció el sábado la revisión de la política de sanciones sobre Venezuela, una vez que consideró que la acción es “incongruente” con el compromiso de celebrar elecciones competitivas y va en contra de un acuerdo suscrito en Barbados.

El mismo acuerdo llevó a Estados Unidos a flexibilizar su política de sanciones sobre el país sudamericano y extendió licencias temporales relacionadas con el petróleo, gas y oro venezolanos.

La Plataforma Unitaria Democrática denunció la víspera la violación del acuerdo y exigió la reversión de la decisión, así como el apoyo de la comunidad internacional para presionar al respeto del compromiso.

Apenas la víspera, la Organización de Estados Americanos declaró que la confirmación de la inhabilidad de Corina Machado elimina cualquier posibilidad de elecciones libres, justas y transparentes en Venezuela.

Dijo que la confirmación de inhabilitación hasta por 15 años de Corina Machado, así como la “prisión política” de actores vinculados a esa candidatura, ponen a la vista que el gobierno venezolano “no tenía ninguna intención de permitir la realización de elecciones limpias y transparentes”.

¿Oposición? ¿Para qué? Es el mensaje duro del poder en Venezuela. Que lo vea quien tenga ojos para verlo, y sobre todo, aguante para sufrirlo.

Una cosa es clara, los males de la democracia siempre se curan con más y mejor democracia, nunca con la merma o extinción de ésta. ¿O no?

Roberto Cienfuegos J.

@RoCienfuegos1