COVID Y EL ERROR DEL GOBIERNO FEDERAL

Ya déjense de estar inventando cosas, de estar sacando cortinas de humo para distraernos de la

 violencia galopante con el control de la delincuencia organizada del 60% del territorio nacional, el problema de los muertos por la pandemia del COVID y la crisis económica.
Ya basta de preocuparse más por las elecciones que por los mexicanos que están muriendo diariamente por la negligencia y falta de oficio de un gobierno ciego, entercado en cumplir caprichos, si las gana o las pierde no se preocupe usted ya es presidente ya logró su lugar en la historia ya hizo su intento por cambiar a México, deje que los mexicanos tomen las decisiones más acertadas, no trate de imponerles sus caprichos o sus ocurrencias ya somos adultos porque lo más importante en este momento debe ser salvar las vidas de los mexicanos que están muriendo por el Covid usted está pensando más en la campaña del año que viene que en las vidas de esos mexicanos, es evidente, cuando usted ha sido quien primero mencionó y acusó a la oposición de egoísta por estar pensando en las elecciones. ¿cuál oposición señor presidente? si no existe tal. Lo que si existe y usted pretende meter en un mismo cajón, es el hartazgo popular, por la falta de apoyos a las fuentes de empleo, porque muchos mexicanos están sufriendo ya los embates del desempleo, que usted pretende palear con limosnas, limosnas que conforme avanza el tiempo y se dispara la inflación no les alcanzará ni siquiera para un plato de frijoles, aunque sea de aquellos que usted acusaba con gorgojos.
Entienda que los mexicanos no estamos buscando el poder eso lo hacen los políticos, pero la mayoría no somos políticos, son ciudadanos que viven de su trabajo, muchos mexicanos con toda una vida pagando impuestos, a diferencia de muchos políticos que ni siquiera pagan impuestos porque no pueden demostrar ingresos para llevar una vida de turisteo político por todo el país.
Cuales son los errores cometidos que hoy el pueblo de México está pagando con vidas. La falta de previsión para destinar recursos a la compra de reactivos suficientes para aplicar las pruebas del COVID, el mismo Cuauhtémoc Cárdenas dijo que debían suspenderse los magno proyectos para destinarlos a salvar vidas, con ello, habría sido más fácil controlar la Pandemia, el costo de cada prueba en los laboratorios que venden los reactivos varía de mil a mil quinientos pesos, en México para pichicatear las pruebas se aplican solo a personajes de la política a veces hasta tres veces y al pueblo lo limitan o tienen que acudir al sector privado donde el costo va de tres mil hasta seis mil pesos.
En un país con cerca de ciento veinte millones de habitantes, si se hubiera previsto aplicar las pruebas con tiempo a diez millones de mexicanos, el control sería más eficiente y no sería necesario pensar en aplicarse a todos los mexicanos pues se estarían identificando así las fuentes de contagio, nadie sabe cuantas pruebas tiene el gobierno disponibles para aplicarlas ni cuanto costaron ni a quien se las compraron, si es que se las compraron a alguien, si fue licitación o también fue por asignación directa como los ventiladores o como las pipas del huachicol. Si para aplicar las pruebas a diez millones de personas, se gastarían 15 mil millones de pesos, si es se hiciera se salvarían muchas vidas, porque se identificarían las fuentes de contagio y no sería necesario aplicar más, porque los demás si se previniera no necesitarían aplicar más pruebas. Veamos los números, si el gobierno recaudó 1500 millones en una cena con la famosa charola de los empresarios fifís y neoliberales si el avión costó 3000 millones de pesos si verdaderamente se pudiera vender con eso se pagarían pruebas para algunos millones de mexicanos, con los 100 mil millones anuales se da a los ninis, alcanzaría para salvar la vida de más de 70 millones de mexicanos, más del cincuenta por ciento de la población. Que insisto, si se hiciera no sería necesario aplicar las pruebas a más del 20 % de los mexicanos. La construcción del Aeropuerto Internacional de Santa Lucía (AISL) tendrá un costo total de 172 mil millones de pesos, según informó el gobierno federal, cifra que está por encima de los 168 mil 880 millones que se proyectaron para el Nuevo Aeropuerto Internacional de México en 2014, que se ubicaría en Texcoco, suficiente para aplicar las pruebas al total de la población, que no sería necesario aplicárselas a todos si se detectan a tiempo los focos de infección. El tren maya costará mensualmente 146 mil cien millones de pesos y la construcción de la refinería de Dos Bocas contaría con un presupuesto de 41,300 millones de pesos en el 2020, mismo que se ejercería a través de la Secretaría de Energía, a la que en el proyecto de presupuesto del próximo año se le asignaron 48,500 millones de pesos. El costo total sería de 288 mil millones de pesos, suficiente para hacer frente a la Pandemia, con pruebas medicamentos y compra de ventiladores si se necesitara. Así recursos para salvar todas las vida hay, lo que no hay es voluntad política de salvar vidas. Y eso, a la larga, está costando muchas vidas por omisión y negligencia gubernamental. Porque hay otras prioridades y no son la vida de los mexicanos precisamente
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@Eduardo Sadot