Es cierto, en política los amigos son de mentiras y los enemigos son de verdad. Esto que diversas veces ha pronunciado
el presidente Andrés Manuel López Obrador ha quedado patente en el caso de Notimex, que involucra a la última titular de la extinta Agencia de Noticias del Estado Mexicano, Sanjuana Martínez Montemayor. ¿Cómo ocurrió esto? ¿Y cómo es que el presidente, un auténtico animal político en el sentido aristotélico por supuesto, da indicios de que perdió la brújula? Saben él y Dios.
Esto así porque suman al menos dos veces que López Obrador niega las acusaciones hechas públicas en el periódico La Jornada el nueve de enero por la periodista, según las cuales se le plantearon “moches” en las liquidaciones pecuniarias asociadas a Notimex para engrosar los caudales de la virtual candidata presidencial de Morena y aliados, Claudia Sheinbaum, en lo que constituyó un auténtico obús contra la aspirante presidencial, Morena y ni qué decir al presidente. Tanto Sheinbaum como el presidente han negado las afirmaciones de la periodista, a la que López Obrador le encargó Notimex y que ella se comprometió a transformar en la mejor de habla hispana.
Pero según todos los registros, sólo el ex canciller Marcelo Ebrard se había atrevido a tanto. En medio de la guerra de encuestas para definir su aspiración presidencial por Morena, Ebrard también acusó el desvío de recursos públicos a través de la Secretaría del Bienestar para favorecer a Sheinbaum.
Pero las denuncias de Martínez fueron más graves. Alcanzaron de manera directa a la hoy titular de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, antes secretaria del Trabajo, y al hoy responsable de esta cartera, Marath Bolaños López, lo mismo que a José Luis Sánchez Cuazitl, director jurídico de esa dependencia. Claro, estas denuncias crearon un verdadero huracán de categoría Cinco, como el que destrozó en octubre a Acapulco.
“Creo que no es cierto”, atajó unas horas después de los dichos de Martínez en una gira en Guerrero el presidente López Obrador, quien de inmediato reclamó pruebas a la ex funcionaria acusadora.
Claro, defendió la honorabilidad de los funcionarios señalados por el índice de fuego de Sanjuana.
Añadió: “Yo respeto mucho lo que dice esta compañera, pero no comparto”, insistió.
Pero de nueva cuenta en su matutina este lunes, López Obrador tildó de “mentira” lo que dijo Martínez del “moche” del 20 por ciento de las liquidaciones de trabajadores de Notimex.
”Ya di a conocer que no es cierto que se haya condicionado el pago a Sanjuana, a que otorgara un moche de un 20% al secretario del Trabajo (Marath Bolaños) porque ese dinero iba a ir a la campaña de Claudia Sheinbaum”, dijo este lunes 15 de enero en Palacio Nacional.
Ratificó la defensa de los acusados por Martínez, la ex funcionaria a la que en estos días se le trató sólo como “esta compañera”, un agudo contraste con la defensa a ultranza, cargada de elogios personales y repetidas veces que hizo de ella a lo largo de los últimos cuatro años durante el conflicto laboral que concluyó con la extinción de Notimex, y que incluyó varias visitas de la periodista a Palacio Nacional, donde más de una vez apareció abrazada y sonriente por el jefe del Ejecutivo federal. Mire usted si no.
En marzo del 2021 y luego de que el Departamento de Estado de Estados Unidos diera a conocer su informe 2020 sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, según el cual en México el principal problema en la materia es que prevalece la impunidad y señalaba a Martínez, todavía la poderosa directora de Notimex, de haber orquestado ataques contra reporteros y de dar órdenes para eliminar o no publicar contenido sobre ciertas instituciones y funcionarios, López Obrador dio un paso al frente por ella.
Planteó entonces “¿Por qué el Gobierno de Estados Unidos opina sobre asuntos que solo le competen a los mexicanos? ¿Por qué se lanzan contra Sanjuana, que es una mujer que merece todo nuestro respeto y es una buena periodista?”. Eso dijo el presidente.
Antes, en 2019 y ante los reclamos de trabajadores por el despido injustificado de Notimex, López Obrador dijo esto: “Sanjuana es una extraordinaria persona, una muy buena periodista, honesta. Le tengo toda la confianza por su trayectoria como buena periodista. Cuando se es un buen periodista, por lo general, se es muy humano y no se cometen injusticias, un buen periodista no es capaz de cometer una injusticia”, dijo.
Ahora, al fragor del cierre de Notimex, pero sobre todo ante los señalamientos de alto calibre de Martínez y cuando se está cerca del arranque formal de las campañas electorales y de la lucha con todo por la presidencia, López Obrador se refiere a Martínez, como “esta compañera”. Martínez ya advirtió que con mucho gusto aportará pruebas de sus aseveraciones públicas y que sus abogados trabajan ya en las demandas que presentará
Me pide el presidente @lopezobrador_ que muestre pruebas de las liquidaciones ilegales al extinto @SutNotimex asesorado por Arturo Alcalde, padre de la secretaria @LuisaAlcalde y sobre las demás irregularidades, con mucho gusto, las tienen mis abogados que preparan las denuncias”, tuiteó Martínez.
¿Qué sigue? ¿cuál es la verdad? ¿Cuál es la mentira? ¿Amigos? ¿Ya no? ¿Quién se beneficia? ¿A quién se protege? ¿Quién pierde? A los mexicanos nos deben al menos una investigación seria para dilucidar con absoluta claridad qué fue lo ocurrido en verdad, porque después de todo Notimex fue sufragada con fondos públicos. Una pregunta final, pero no ociosa: ¿Será éste el último obús en el caso Notimex?